Este lunes 21 de marzo se llevó a cabo la inauguración del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) en Santa Lucía, uno de los megaproyectos impulsados por el presidente Andrés Manuel lópez Obrador y desarrollado por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
Con respecto a la infraestructura de la obra, la página oficial del AIFA señala que se implementó “tecnología de vanguardia” para su elaboración, pero, ¿sabes qué es lo que hace tan especial a la torre de control del aeropuerto? En El Financiero te contamos.
La torre de control del AIFA tiene una altura de 89.20 metros, siendo la segunda más alta del país, después de la de Cancún, la cual mide 96 metros. Además, cuenta con símbolos del poderío del México prehispánico.
En el fuste de la torre se representa un “macuahuitl”, que es un arma azteca semejante a una espada, un palo con filos de obsidiana a los lados. Su nombre proviene del náhuatl “maitl”, mano, y “cuáhuitl”, madera o palo. En la base, se representa la solidez y protección de un “chimalli”, un escudo con plumas ampliamente usado en Mesoamérica.
La torre de control del AIFA está equipada con tecnología en radioayudas y comunicaciones que tienen la finalidad de brindar facilidades para organizar y agilizar el flujo del tráfico aéreo de forma segura. La estructura también cuenta con sistemas de vigilancia automáticos, sistema de navegación y sistemas de meteorología.
Además, la cabina cuenta con cristales inclinados, colocados a 18 grados para evitar reflejos solares y para que, en caso de lluvias, el agua corra lo más rápido posible y de esta forma permita tener visibilidad de al menos 90 por ciento.
Cabe mencionar que la estructura tiene como base una circunferencia de 60 metros de diámetro en una cimentación de 5 mil toneladas, la cual permite soportar el peso de la torre de mil 800 toneladas.